Liderazgo incómodo
No es cómodo (al menos para mi) pararse frente a la multitud y dar el primer paso.
Dar instrucciones es fácil. Proponer ideas sabiendo que pueden fracasar, resistir el instinto por sobrevivir, ser vulnerable a las críticas o provocar el status quo no es fácil.
Y porque no es fácil es poco común.
Y porque es necesario y poco común, es sumamente valioso.
El liderazgo que es incómodo es precisamente el que se necesita.