Inspirar y controlar
Las personas libres y autónomas tienden a ser más creativas. Las personas que son libres, tienden a buscar sus causas y tienen un propósito claro. En pocas palabras, en una organización, un líder que empodera tiene un equipo creativo y con propósito.
Hasta aquí vamos bien.
Un líder que empodera, no es un líder que está encima de las personas controlando cada detalle—y cuando las personas no tienen a alguien midiendo y retroalimentando el desempeño de manera sistemática y objetiva, los números no se dan. Y, honestamente, los números no son lo más importante para un equipo realmente creativo.
Ningun extremo es bueno y no se pueden hacer ambas cosas al mismo tiempo. Hay que viajar entre ambas, entre crear los medios necesarios para la creatividad y el propósito y mantener el desempeño deseado.